Personas mayores:
Una nueva fuerza para el desarrollo
¿Por qué una "nueva fuerza"?
Una revolución demográfica está ocurriendo en todo el mundo. Actualmente hay alrededor de 600 millones de personas de 60 años y más; esta cifra se duplicará hacia el año 2025 y llegará a casi dos mil millones hacia el año 2050 - la mayoría de ellos en países en vías de desarrollo (ver gráfico).
En nuestro mundo que envejece rápidamente, las personas mayores desempeñarán un papel cada vez más importante - a través del trabajo voluntario, transmitiendo su experiencia y conocimientos, cuidando a sus familias y con una creciente participación en la fuerza laboral remunerada.
Ya hoy en día, las personas mayores contribuyen enormemente a la sociedad. Por ejemplo, en toda Africa - y en el resto del mundo - millones de adultos enfermos de SIDA son cuidados en sus hogares por sus padres. Al morir los pacientes, sus hijos huérfanos (actualmente 14 millones menores de 15 años en países de Africa solamente) son en su mayoría cuidados por los abuelos.
El papel crucial de las personas mayores no se limita a los países en vías de desarrollo. En España por ejemplo, el cuidado de personas dependientes y enfermas (de todas las edades) es en su mayoría llevado a cabo por personas mayores (especialmente mujeres mayores). El promedio de minutos ocupados por día en la provisión de esos cuidados aumenta exponencialmente con la edad de los cuidadores: 201 minutos si el cuidador pertenece al grupo de edad 65-74 y 318 minutos si su edad es 75-84 - comparado con sólo 50 minutos si el cuidador está en el grupo de edad 30-49 (Durán H, Fundación BBVA, 2002).
A veces los mayores soportan demasiadas cargas y responsabilidades...
Tales contribuciones al desarrollo sólo pueden ser aseguradas si las personas mayores disfrutan de adecuados niveles de salud para los cuales políticas apropiadas deben ser adoptadas.
En línea con el Plan de Acción Internacional de Madrid, La Organización Mundial de la Salud lanzó en 2002 un documento "Envejecimiento Activo - Un Marco de Políticas", describiendo sus criterios y perspectivas para un envejecimiento saludable a lo largo de toda la vida.
FUENTE: UNESCO